Poesía: El todo poético 3

 



El aire no envejece. Entra a los pulmones con cierta autoridad siempre. El aire no es un objeto necesariamente pero sí un movimiento. Los pulmones reciben el aire, que trae el oxígeno y otras partículas, como una ráfaga de piedras. Los pulmones evolucionan rápido. La fusión nuclear que se debate en los pulmones, distribuida a lo largo de la vida, es la clave para entender la eternidad. El aire es movimiento como lo es el agua. El agua es más pesada, aunque los peces han logrado respirar a través de ella, lo que supone que la respiración no depende del aire exclusivamente. Donde el oxígeno pueda viajar grácilmente, allí estará. Hay seres que respiran bajo la tierra. Los llamamos muertos, pero son seres que han entendido que el oxígeno no lo es todo, entonces se han quedado a descansar en forma de cuarzo, diamante, o simplemente una piedra, o una pepita de oro, un hueso.

El aire es un vehículo como el agua. Es una simple forma de comportarse el espacio en el universo. El aire y el agua transportan el oxígeno, lo arrastran como el semen a los espermatozoides. De hecho, es el mismo principio porque el semen es agua y la vida es oxígeno. Entonces el oxígeno es el principio de la fusión en nuestro cuerpo. Esa fusión que te va destruyendo a lo largo de los años. La muerte no se puede evitar porque los organismos necesitan de energía para vivir, una energía explosiva como el oxígeno. Entonces en la célula hay una explosión, para poder poner en movimiento la graciosa forma que es el ser vivo.

El ser vivo es un ente que tiene conciencia. Una roca es un ser vivo. Un ser vivo que ha aprendido, a través de los años, a distribuir mejor los elementos. Por eso la roca dura tanto tiempo en el cosmos. La roca es eterna pero el agua la diluye y la hace arena y vuelve a viajar con el viento. Y así transcurre la vida de la tierra.

¿Cómo ser una roca? Respirando menos. De esa manera las articulaciones, los órganos y las canciones y las cartas de amor que se tomaban de la mano por la Candelaria, se quedan pegadas como en una pared de una cocina donde se cocina con leña. Camina más lento. Habla pausadamente. No vayas tan rápido que entonces la muchacha anda atrás tuyo queriendo alcanzarte. Y corre que corre. Eres un animal. Un desvergonzado. Seas deportista o no. Te estás destruyendo.

El arte de ser una roca tiene millones de años más que cualquier otra cosa que exista. Es un manual de comportamiento. La tierra parece que se mueve poco y ese es su secreto. La tierra es sigilosa, sin embargo, asociada con el agua, puede ser un fenómeno transformador de importantes dimensiones. La tierra también transporta el oxígeno, como lo puede hacer el agua, el aire o el fuego.

Del fuego no hablaré porque la relación que existe entre el fuego y el aire es muy compleja para ser escrita. Pero si queremos ser un poco más precisos, podemos decir que el fuego baila con el aire. Es un baile fuerte, vibrante. Un baile que desata chorros de energía. Al final el aire sube deleitado por el fuego como una mujer que recién ha hecho el amor. Una mujer que recién ha hecho el amor no camina, se eleva. Por eso debemos tener cuidado dónde ponemos los elementos porque ellos tienen una peculiaridad: son ellos siempre. La persistencia es un componente constitutivo de los elementos. Ellos no se cansan de ser ellos mismos. Por eso dijimos al principio que el aire no envejece, y es que no envejece ni el agua, ni la tierra. El universo no envejece. Ese concepto no existe, como tampoco existe el arcoíris en los poemas de Nicanor Parra.

Tampoco podemos caer en la majadería de decir, como lo hizo Pessoa, que no somos nadie. En el fondo sabes que no es verdad, que tienes una profunda rabia e impotencia de no poder descifrar la realidad. La realidad es un fenómeno telúrico. Es indiscutible, misteriosa, poderosa, y mágica. La realidad es tan poderosa que está sincronizada con el cerebro. La realidad es el Alpha y el Omega de la mente. Así te emborraches, te drogues, duermas, al final vas a volver a la realidad como el amanecer. El despertar pues, es la realidad: ver las cosas tal cual son. El despertar no puede ser un ring de boxeo entre lo que a mí me gustaría que fuese y lo que realmente es. Una expresión como “planeta salvaje” la cual se ha hecho popular entre nosotros desde hace algunos años, es prueba de que la humanidad no ha entendido que la existencia no es cruel. Es una voluntad perfecta que ha puesto a andar todo lo que existe. La realidad y la lucidez están de la mano. La lucidez es estar apegado a los principios de la materia; es estar cerca. En fin, hacer todo lo posible.

La transición del pensamiento circular al pensamiento simbiótico tomará el mismo tiempo que el que les ha tomado a los humanos entender que la geometría está errada porque nada es geométrico. Algo tan increíble como lo es el universo prescindió de la geometría, por lo tanto, la geometría no nos lleva a crear cosas fascinantes sino a crear realidades predecibles. Incluso el círculo y la esfera son predecibles. llegará un momento que se hagan predecibles. Sea a través del tiempo o el espacio para hablar en la jerga de nosotros los humanos.

La igualdad optimiza el esfuerzo. Los patrones pueden gerenciar procesos asombrosos. No puedes dejar de ser roca, no puedes dejar de ser agua. El agua es vapor cuando se expone al calor. Entonces entra a los pulmones de forma distinta. Es un humo saludable que yo recomiendo para todos. El agua en forma de vapor.

Los entes tienen alma y disfrutan de las buenas intenciones. El agua disfruta de las canciones y de las palabras, porque cada partícula es la mente maravillosa del ser humano.  Este conocimiento grácil no ayuda en nada a prolongar la vida, es solo un fenómeno referencial para entender la relación de la mente humana con todo lo que la circunda. La conciencia tiene que salir del cuerpo y almacenarse en dispositivos más seguros y duraderos. La mente es extremadamente frágil y adolece de caducidad temprana como todo lo relacionado con los seres animosos, animaloides y vegetaloides que habitamos el planeta tierra. La materia mineraloide se mueve lenta, constante y persistentemente. La materia mineraloide asume que el consenso está definido por un plan superior. No hay nada que entender.

Lo más cercano a una roca es un cocodrilo. Si caes al agua, en su territorio, te va a comer y no te va a preguntar si tienes una hija a la que amas muchísimo, o si tienes un perro que se llama Santo. Santo, puedo asegurarles, era un perro feliz y corría velozmente. Era muy inteligente y un día cazamos una rata juntos. Santo también pudiera ser comido por el cocodrilo. Algunos animales pueden domesticarse. Todo dependerá de muchos factores, entre los que predomina el tamaño del cerebro. Mi abuela tenía un perico que hablaba y decía algunas groserías. Pero no estaba domesticado, estaba preso. Vivía en una jaula y a veces yo le daba chocolate y sus pupilas se ponían grandes. Si el perico midiera 2 metros nos hubiera comido a todos sin ningún remordimiento; sin embargo, solo medía pocos centímetros y vivía atrapado en una pequeña jaula. Igual sucede con los perros y con todos los animales domesticados. La domesticación es una forma indiscutible de poder, una forma antigua y sutil de dominación.


EL CENTRO DEL PIXEL, una selección de poesía inédita del escritor venezolano Carlos Zarzalejo. Parte de su obra poética: poemas en verso y poemas en prosa. 

Comentarios

Luz María López ha dicho que…
Esta lectura ha sido interesante. Un viaje. Introspección - Retrospecciòn. Imagino a un hombre sentado a la ribera de un río, un Siddharta, ponderando el ritmo de la existencia, las propias renuncias y albores. Ahí frente a sus ojos, lo inexplicable y obvio. Self disvovery. Samsara. Fluir. Converger.
Sol González P ha dicho que…
Apreciado Carlos, te felicito siempre tan poético . Un recorrido interesante que te llega a lo interno de tu emocionalidad. Sigue adely con tus metas